jueves, 14 de mayo de 2009

¿Qué hacer en un accidente por descarga eléctrica?

El daño que causa la electricidad esencialmente de la intensidad de la corriente eléctrica que atraviesa el organismo. Si es débil, un miliamperio (1 mA) por ejemplo, el sujeto recibe una simple sacudida. Si es de intensidad superior, unos 10 mA, se observa en el trayecto de la corriente la tentanización de los músculos, los que, so son flexores, harán que la víctima permanezca pegada al conductor. Por eso cuando la corriente se interrumpe la víctima se despega y sufre diversos traumatismos al caer. Por el contrario, si la corriente pasa por los músculos extensores, la víctima es proyectada lejos con riesgo de producirse un grave traumatismo. Si la intensidad de 10 mA se mantiene, la tentanización se generaliza y acaba por interesar a los músculos respiratorios, determinando una asfixia seguida de paro cardiaco. Una intensidad de corriente de 80mA, o más si pasa por el tórax, o si dura tiempo suficiente (algunos segundos) produce la fibrilación ventricular -seguida de un parto circulatorio- que ocasiona en segundos un estado de muerte aparente.

El voltaje de la corriente interviene también, ya que está directamente relacionado con la intensidad. El peligro de la corriente eléctrica se inicia cuando alcanza valores superiores a 24 voltios en corriente alterna, o más de 50 voltios en corriente continua. Esta es menos peligrosa que la alterna. La resistencia opuesta por el organismo al paso de la corriente es muy variable, según sea el vestido, el calzado que lleve la víctima y sobre todo la humedad de la piel. Se comprende que para una misma corriente, una resistencia más débil permitirá el paso de la intensidad eléctrica más elevada, que producirá las lesiones más graves. Por ejemplo, la resistencia de la piel seca puede ser el orden de 100 000 ohms, pero descenderá a 1 000 ohms si el sujete está sudando.

ALGUNAS PRECAUCIONES ELEMENTALES
- Antes de efectuar cualquier trabajo, en las instalaciones fijas debe interrumpirse el paso de corriente con ayuda de una corta circuitos general, el interruptor del contador. En las instalaciones móviles deben desconectarse las tomas.

- Es imprescindible llevar guantes secos y que no estén rotos.

- No se debe trabajar nunca en un suelo húmedo con calzado que esté mojado. Conviene aislarse con una plancha o con botas de hule.

- En el baño no hay que utilizar el secador de pelo, la rasuradora eléctrica, ni hablar por teléfono.

CONDUCTA A SEGUIR
La primera medida que deben aplicar los testigos eventuales es sin duda cortar la corriente (atención: la interrupción puede efectuarse automáticamente usando el interruptor, pero a menudo cesa después de la liberación de la víctima). Hay que cuidar que no se produzcan caídas y traumatismos eléctricos en el momento en que se detiene la corriente; vale más prever cualquier accidente. De hecho, y este es un punto muy importante, la manera de proceder queda para los salvadores, que deben aislarse bien para no correr peligro. La descarga eléctrica en cadena puede producirse. Por ello, si no hay ningún riesgo de peligro inmediato, es decir, si el que ha recibido la descarga no está en contacto con la fuente de energía, es preferible esperar la llegada de los socorros. El resto del tratamiento no es muy específico. El paro respiratorio o cardiorespiratorio se trata de la manera clásica, y las quemaduras producidas por el paso de la corriente van a sanar de la misma manera que cualquier otra quemadura.